Encontrar la voz y el tono adecuados en los correos electrónicos asegura que puedas llegar a tus clientes de forma significativa y auténtica. Puede parecer difícil al principio, pero te prometemos que se vuelve más fácil una vez que entiendes los conceptos básicos.
¿Cuál es la diferencia entre la voz y el tono?
En pocas palabras, la voz es lo que se dice a los clientes (el mensaje) y el tono es cómo se dice (la actitud con la que se expone el mensaje).
Piensa en la voz como la personalidad de tu correo electrónico: ¿cómo quieres que te vean tus clientes? Tu voz debe ser consistente en todos tus mensajes. Para encontrarla, piensa en los valores de tu empresa y el mensaje que quieres compartir con tu audiencia.
Por otro lado, el tono es la actitud de lo que dices en tu correo electrónico. Y, al igual que la actitud puede cambiar, también lo puede hacer tu tono. Tu tono puede ser enigmático, serio o incluso divertido, si esa es la actitud que quieres transmitir.
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Encontrar tu voz y tu tono
Ahora que sabes qué son la voz y el tono, ¿cómo puedes encontrarlos? ¡Buena pregunta! Depende de tus objetivos para la estrategia de marketing por correo electrónico y de la marca en general.
Si eres nuevo en el marketing por correo electrónico y necesitas ayuda para establecer tu tono y tu voz, te recomendamos escribir tres correos electrónicos distintos para expresar el mismo mensaje. Imagina que quieres ofrecer un cupón por un diez por ciento de descuento en una compra. Escribe el correo electrónico con tres voces distintas para tu cliente ideal con lo que le dirías sobre este cupón.
Una vez que hayas escrito tres correos electrónicos con tres voces diferentes, observa cuál es la que más resuena en ti. ¿Qué correo electrónico se parece más a ti y representa tu marca de forma más auténtica? ¿Sabes cuál es? Genial. Esa es tu voz.
Ahora sigamos con el tono. ¿Quieres que tus correos electrónicos sean optimistas, sinceros o incluso objetivos? Nuevamente, prueba algunos correos electrónicos diferentes tomando el correo que escribiste para encontrar tu voz y ahora prueba algunos tonos distintos con ese mensaje. ¿Cómo se siente? ¿Te presentas a tu audiencia con la actitud correcta?
Una vez que hayas establecido tu tono, toma nota de tu voz y tu tono con unas pocas palabras que pueden actuar como tu estrella del norte cuando estés escribiendo tu correo electrónico. Por ejemplo, tal vez tu voz es conversacional y tu tono es divertido. Anota esta información y tenla a mano cuando escribas tus correos electrónicos de marketing. Te ayudará a ser consistente tanto en la voz como en el tono, lo cual es increíblemente importante en el marketing.
Usar la voz y el tono en el marketing por correo electrónico
Esto nos lleva al siguiente punto: la consistencia. Una vez que te sientas cómodo con tu voz y tu tono, es importante que los mantengas. Eso no quiere decir que no puedas hacer una broma de vez en cuando aunque hayas optado por un tono más formal, pero la mayoría de tus correos electrónicos deben sonar igual.
Cuanto más consistente seas con la voz y el tono, más reconocible será tu marca para los clientes que reciban tu correo electrónico. Esa consistencia ayuda a que tu correo electrónico se destaque del resto de los mensajes en su bandeja de entrada.
Piénsalo de esta forma: Tu audiencia debe poder decir que es tu correo electrónico incluso si no puede ver el nombre de tu tienda en él; así de clara debe ser tu voz. Así que, tanto si escribes un correo electrónico de bienvenida como de feliz cumpleaños, debes dejarte guiar por tu estrella del norte.